Tengo un amigo fanático de las compras por Internet quien me dice ahorrar más de un 35% de promedio con ellas; incluso hay productos –me aseguró– en los que la diferencia es el doble. Sin embargo, mi primo, que tiene la misma edad, nunca hizo una compra en Red, no le gusta adquirir sin la experiencia, prefiere ver y tener el producto en ese instante. Por mi parte, estoy entre los dos, hay productos que adquiero por Internet y otros personalmente, aunque me está pasando la fiebre del ON-OFF-ON, lo miro ‘on line’, voy a la tienda, lo veo, lo pruebo, para después volver y conseguirlo por Internet. Por cierto, ¿han oído hablar del ZMOT (Zero Momento Of Trust)? Se refiere al momento de tomar decisiones on-line. Les recomiendo leer más sobre el tema en Google.

El comercio electrónico ha crecido a un ritmo de doble dígito y de forma sostenible durante diez años, pero en los últimos tres, el número de empresas que han decidido vender por Internet se ha triplicado. El ultimo ‘player’ a escala mundial a salir en Bolsa, www.alibaba.com, es una de las empresas de más éxito en este sector, mayor que Amazon y Ebay juntas. Esta compañía vende de todo, hasta fondos de inversión con los que ha recaudado 87 billones de dólares en activos.

Muchos empresarios dominicanos a los que asesoro me dicen que nuestro país es pequeño, que no tiene escala y que hemos perdido la corriente… y les hablo de este nuevo ejemplo: www.konga.com, que a pesar de la feroz competencia de Ebay, Amazon o Alibaba, es la plataforma de ecommerce que más crece en el mundo. ¿Y saben de dónde es? De África, específi­camente de Nigeria, y su fundador, SimdulShagava, ya es uno de los diez hombres más influentes y ricos del continente africano.

Hay una resistencia en nuestro país de los empresarios por el e-commerce, de la aceptación inicial se vuelve a lo rutinario. Nos empeñamos en que el Gobierno imponga impuestos a las compras por Internet –algo lícito–, pero no buscamos la solu­ción ideal para la reactivación comercial.

Resistir es inútil, la tecnología es el instrumento para hacer evolucionar nuestro modelo de negocio y competir en el siglo XXI. No importa cuál sea el producto o servicio, hay que diver­sificar e innovar nuestro modelo de ventas y buscar nuevas vías de crecimiento. Lejos de un problema, es una oportuni­dad de conectar con 605 millones de consumidores internautas que ya existen en todo el mundo. En el Caribe, 15 millones de personas ya usan Internet. El mercado potencial del Cari­be y Centroamérica suma 26 millones de personas, de las cuales RD representa el 20%. Tenemos que aprovechar esta oportunidad.